LA IMPORTANCIA DEL CUIDADO DE LA PIEL DE LOS NIÑOS

Los niños necesitan de cuidados constantes y su piel no es una excepción. A edades tempranas, los niños tienen menores mecanismos de defensa, y por lo general, todo les afecta en mayor grado.

Cuando los niños tienen problemas cutáneos, no podemos demorarnos en ponerles remedio. La importancia en el cuidado de la piel está fuera de toda discusión, pero en el caso de los pequeños, en que ésta es más fina y frágil, todavía debemos estar más pendientes, si cabe.

Por eso no está de más recordar algunos consejos para el cuidado de la piel que nos puede resultar útil tener presentes en todo momento.

Cuidar la piel de los niños: la limpieza

Este es probablemente el punto sobre el que hay que poner mayor atención, ya que una correcta y frecuente limpieza de la piel evitará que hagan aparición la mayor parte de los problemas.

Para ello, es suficiente con utilizar un jabón suave cada vez que bañemos al niño o éste se duche. Hemos de preocuparnos, eso sí, de que si ya tiene una edad en la que puede hacerlo sólo, se preocupe por no descuidar determinadas zonas como las axilas, detrás de las orejas o el cuello.

Existen infinidad de productos para el cuidado de la piel de los niños, pero la mayor parte de ellos no serán necesarios si no aparecen problemas concretos.

Problemas más frecuentes

Algunos de estos problemas que presentan la piel de los niños son entre otros, los siguientes:

Alergias– No es extraño que a veces, el niño presente enrojecimiento en su piel por el uso de algún nuevo producto que le haya producido alergia. Es importante fijarse bien en la composición del mismo para tratar de detectar qué sustancia pueda haber sido la causante. En cualquier caso, para evitar reacciones alérgicas, conviene aplicar previamente sobre su muñeca una pequeña dosis del producto nuevo que vayamos a usar, y observar si se produce algún tipo de picor o rojez que nos avise de un posible caso de alergia.

Los efectos nocivos del sol- La piel de los pequeños es especialmente sensible a la acción de los rayos solares, y por lo tanto hay que extremar las precauciones en relación a su exposición al sol. El uso de un protector solar se hace imprescindible cada vez que el niño vaya a estar expuesto al sol por un periodo de tiempo prolongado, y usar gorra, cubrir las partes más sensibles con ropa, o evitar el sol en las horas en las que luce con más fuerza son recomendaciones para el cuidado de la piel del niño que conviene seguir en todo momento.

Las quemaduras– Los accidentes domésticos causados por el fuego, la plancha o el radiador ocasionan que más de una vez los niños sufran quemaduras en su piel. Estas quemaduras deben tratarse del mismo modo que en el caso de los adultos, y lo único que podemos hacer al respecto es tratar de prevenir estos accidentes advirtiendo a los niños de ese peligro.

Heridas- Las heridas, arañazos y cortes son también una constante en la infancia. Si se produce esta circunstancia lo primero es lavar la herida con jabón y evaluar su gravedad. Si se trata de un rasguño o un corte superficial podemos realizar la cura nosotros mismos, aplicando un desinfectante y cubriendo la herida con gasa y esparadrapo. Si es un corte profundo, lo mejor es acudir a un centro médico de urgencias para que puedan aplicarle puntos de sutura.

Picaduras- Las picaduras de insectos son otro problema frecuente con el que nos encontramos. Los niños suelen rascarse para tratar de mitigar el picor, pero lo único que consiguen con ello es crearse una herida que puede traer problemas más graves. Por eso, cuando nos encontremos ante este caso, conviene tratar de convencer a los pequeños de que no se rasquen, y aplicarles algún tipo de pomada que los alivie.

Eczemas y erupciones– Hay multitud de causas que motivan la aparición de eczemas y erupciones cutáneas, desde alergias hasta picaduras o el roce con alguna planta. En todo caso, este no es un problema menor, y aunque las molestias pueden presentarse en distinto grado, lo más recomendable es acudir a la mayor brevedad al médico para que pueda examinar al niño y determinar el origen y la gravedad del problema

Caspa- Aunque se trata de un problema principalmente estético, el niño puede llegar a sufrir de algún tipo de rechazo en su entorno por este motivo, así que no hay que menospreciarlo. Por fortuna su solución es sencilla: el uso de un buen champú anticaspa será suficiente.

Cuidar la piel: una inversión muy rentable

Hemos explicado la importancia del cuidado de la piel en los niños, los problemas más frecuentes a los que se enfrentan y hemos dado una serie de tips para el cuidado de la piel en distintas circunstancias.

La piel nos protege de infecciones y es nuestra ventana al exterior, ese órgano con el que estamos en contacto directo con el resto del mundo. Cuidar de la piel es importante a todas las edades, pero hay que conocer las particularidades que se dan en cada caso, según la edad, el periodo vital, la zona del cuerpo o el tipo de piel que queramos cuidar.

No es lo mismo el cuidado de la piel en el embarazo que en la infancia, ni el cuidado de la piel grasa que el de la piel seca. Por eso es importante estar bien informados de los principales problemas que pueden surgir, de los productos para el cuidado de la piel que son más adecuados en cada caso o de los alimentos para el cuidado de la piel que más beneficios nos aportan.

De este modo seremos capaces de proteger nuestra piel de forma eficaz en todo momento y alargaremos el periodo en el que ésta luzca sana, joven y llena de vida. ¿No es eso lo que queremos todas?